Llorar sin lagrimas después de terminar un sueño que solo produce desvelo y me desilusiona por completo, permanecer sentada sin una sola palabra hace que teja estos hilos entre los dedos, de oro o de plata, de barro o de vidrio, que solo confunden mis atisbos.
Los retazos de sangre y de niebla se rescatan de un olvido fulminante... que no es olvido... si no retorno a lo diurno, al aquí o al ahora, incorporandose cada vez mas adentro y haciendo que cada vez me sienta mas mal por verlos.
¿Por qué callar?¿Por qué no gritar?
24 dic 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario